Realizar el correcto mantenimiento de una máquina de soldar es fundamental para prolongar la vida del equipo. A continuación hablaremos de algunas tareas básicas que hay que realizar con frecuencia para evitar el deterioro prematuro y para que las soldaduras queden siempre perfectas. 

¿Por qué realizar el mantenimiento de una maquina de soldar?

Seguir un programa de mantenimiento de una máquina de soldar prolonga su vida útil y ayuda a que los resultados sean perfectos, tanto estéticamente como funcionalmente. Los llamados cordones de soldadura serán uniformes, con pocas proyecciones, sin poros y más resistentes. 

Algunos de los consejos que se muestran son válidos para todas las máquinas, otros, sin embargo, dependerá del tipo de equipo de soldadura. En esta pequeña guía se exponen cuáles son los puntos a tener en cuenta en cada caso particular. 

Mantenimiento común para todas las máquinas de soldar

Estas son algunas operaciones básicas para el mantenimiento de una máquina de soldar. Todas son importantes para que los equipos estén siempre a punto, listos para ser usados. 

Revisión profesional periódica. El mantenimiento de una máquina de soldar incluye revisiones periódicas por profesionales para comprobar el amperaje y el estado interior de los componentes. 
Revisión visual general. Una revisión visual al terminar una jornada ayudará a detectar anomalías antes del siguiente uso. 
Limpieza rendijas ventilación y botoneras. Todo equipo de soldadura dispone de rendijas de ventilación en las que tiende a acumularse la pelusa. Lo mismo ocurre con los botones y ruletas. Han de limpiarse después de cada uso con una brocha suave.

Preservar de la humedad. La humedad es uno de los grandes enemigos de las máquinas de soldar. Hay que acumularla en un lugar seco, protegido de la lluvia. 
Ruidos. Si se escuchan piezas sueltas o ruidos extraños, hay que dejar de usarla y llevarla a revisar cuanto antes. 

Mantenimiento específico de máquinas de soldar

Algunas máquinas de soldadura y equipos requieren atención especial. Además de los puntos comunes que te hemos mostrado, hay otros a los que prestar atención en cada caso particular. 

  • Arco Eléctrico. Revisar porta-electrodos, cables y bornes al finalizar la jornada. Las partes metálicas se pueden limpiar con un cepillo de púas.
  • TIG. Se ha de revisar la boquilla de porcelana y la manguera de gas antes de guardarla. Un poro en la manguera puede arruinar una soldadura. 
  • MIG y Arco Sumergido. Mantener siempre limpia la boquilla metálica. Comprobar desplazamiento de la varilla y giro de la bobina de aportación. 
  • Plasma. Revisar el conducto del gas y mantener siempre impecable la boquilla. 

Siguiendo estos consejos, la calidad de la soldadura será la óptima y el equipo durará por mucho más tiempo en perfectas condiciones. En las instrucciones particulares de cada máquina se muestran con detalle otros consejos de uso.